domingo, 23 de noviembre de 2008

La ventana


He necesitado palabras para cubrir una canción sin letra. He necesitado una voz que me dedique un te quiero y no me has llamado. He mirado por la ventana a la que nadie ha mirado… En el parque el banco sigue estando vacío como el depósito de fe que quedaba en mi cuarzo. Aquel que un día colgaba de mi cuello, descansando sobre mi pecho, en el que guardé el mar de tu patria y la luna que bañaba mi ventana.

Ahora que la piedra rosa yace abandonada como todas las creencias que me hablaban de una isla llamada Itaca, llega sigilosa una nueva esperanza tan tarambana como una inocente margarita que decide si me quiere o no me quiere, que me llama o no me llama…

4 comentarios:

Ave Mundi Luminar dijo...

No me canso de repetirlo, me encanta tu forma de escribir.

...Ojalá esa "nueva esperanza" no crezca sobre viejas ruinas, ojalá esa esperanza que llega tarambana, reciba todos tus mimos para que mañana se convierta en la fuente de vida que vuelva a llenar ese "cuarzo menguante".

Más claro, agua dijo...

La naturaleza es sabia: deja que crezca la margarita. Ya se decidirá... ;-)

samuel lau dijo...

........una esperanza alocada ...?dos buenas sensaciones esperanza y poco juicio
que tengas suerte
escribes muy bien,caramba
buenos maestros te habrán guiado

Celia Álvarez Fresno dijo...

Sí... si que escribes bien. Estaré visitando tu blog. Lo pondré en el mío.
Saludos.