
En ocasiones he necesitado cargarme un poco de “impiedad” para que no vuelva a estallarme “la nada” en la cara… Hay momentos en que el sentimiento fluye de golpe y me explota como una bomba con descargas en mis neuronas y tal vez entonces lo mejor es no hablar…. simplemente una caricia con el dorso de la mano pudiera bastar…
Dejé de buscar y anhelar enamorarme y con ello la felicidad. La meditación en la que paré en mi bosque encantado me permitió reflexionar y valorar lo que llevo dentro de mi y ya no siento la necesidad desesperada de compartirlo fuera, por que de verdad ya me sobran los comentarios “aduladores” que luego forman parte sin remedio de “la nada”. No he de demostrar nada a NADIE, ni a mis hijos, ni a mis padres, ni a mis amigos, ni a las personas con las que pueda tener puntos especiales y vibrantes en común, por que el tiempo de compartir descargas de vida no pasa para nadie igual y pretender que los demás sientan la forma y la intensidad igual que uno mismo, es absurdo (ni que decir tiene que es mi opinión y que me iría mejor si no lo olvidara). Conmigo me pasa lo mismo. He entendido que es igual de absurdo pretender entender en la intensidad y forma que los demás se merecen. ¿Sabes cuanta humildad se necesita para no replicar a los reproches de las personas a las que quieres y de verdad te importan? Pero.. mi paz personal (juas) está también en mi propia capacidad y no en algo tan efímero como en el reconocimiento o no de los demás. El mundo no es responsable de mis triunfos o mis pifias, no es responsable de mis capacidades o incapacidades. Yo y sólo yo he de encontrar la combinación de mi cubo de rubik y no desesperarme ni culpar al exterior de lo que sólo ocurre en mi interior.
Comprendo que sólo he subido al lugar que me alza justo sobre los infiernos, pero la paz (cada color en su sitio) es la cima, no el peldaño donde me encuentro.
Lo pasado nos ha ayudado a ser presente y no quiero pensar en el futuro, imaginando la magia… imaginando el amor, imaginando un mundo consciente, imaginando un caballero-poeta-amante, imaginando palabras nuevas, ni momentos especiales…. por que entonces estaría siempre triste al alba…
Los sueños también necesitan ser alimentados y se alimentan de gestos presentes, así como el amor se alimenta de sonrisas y no de palabras. ¿De qué se alimenta la amistad? Yo creo que de consuelo… aunque hay una frase por ahí que dice que la verdadera amistad se nutre de recuerdos y la interesada de esperanza…
Aprendo cada día a levantarme con lo aprendido. Cada vez más convencida de que no somos dueños de nuestro destino y cuando me descubro de nuevo llorando por el sentimiento de impotencia que esto me provoca, he de esforzarme para no seguir llorando… Se me rompió la magia… y me cuesta mucho vivir así… Arrastrando el peso de la muerte (de lo que va muriendo) a cada paso..