lunes, 27 de octubre de 2008

Triste convicción

De nuevo sonaba Fito y los Fitipaldis en el coche. A la altura de Masnou una ráfaga de olores entre pinos y mar revuelto entraba por la ventanilla, trayéndome pensamientos, sensaciones y corazonadas.... Sí, era mi subconsciente... Me hablaba.... A decir verdad, todo el fin de semana ha estado ahí susurrándome.... poesías... claro

Generalmente no me hago la pregunta de: qué hubiera pasado si en lugar de? Por qué las decisiones se toman con total convicción y con todas las consecuencias. Lo triste o paradójico yo diría más bien, es el gemido de lo que pudo haber sido y no fue...

Ya que una se esmera en meditar y se lanza al vacío con ansias de alcanzar la experiencia más pura y brutal, oh terrible realidad!! He de tirar de la anilla cuando lo que se percibe es doloroso y lo más brutal que se adivina es la ostia que te vas a pegar. Bendito paracaídas que bajo la manga llevaba escondido, me lo coloco como puedo, así cuando me trago la tierra, he podido levantarme, con los huesos rotos y el alma aplastada. Llorando de dolor y de rabia, pero convencida de que hice lo que tenía que hacer...

2 comentarios:

Más claro, agua dijo...

Lo importante es estar convencido lo que haces. Si el resultado no es el esperado, queda la conciencia tranquila y el firme propósito de seguir intentándolo.

Seguro que los Fitipaldis ayudaron a amortiguar el golpe ;-)

eldelalámpara dijo...

......siempre un as debajo de la manga...........bien..bien....
..........sabes ?.......a veces nos preocupa si me dijo sino me dijo.....otras lo único que nos llena la cabeza es la espera a que nos digan ya respira sin asistencia.....o mañana lo trasladamos a planta.......que cosas.......móntate en mi zodiac,sabes que hay un bocadillo de sobrasada para tí.